En clase suelo poner como ejemplo de tremenda competitividad -y una de las obras de arte del sistema capitalista- el mercado de la telefonía celular y afines, en el cual se libra una intensa batalla por la innovación a costos competitivos (¿quién no tiene un celular?...si Marx levantara la cabeza y viera al proletariado dotado de smartphones...). Una carrera de trenes de altísima velocidad, con pocos participantes y en el que prácticamente nadie puede subirse. Gigantes empresariales que saben que no pueden parpadear, no pueden relajarse un instante en el ritmo de innovación.
En pocos meses se producen cambios en las posiciones relativas -participaciones de mercado- de los competidores. Una innovación exitosa le propina un fuerte codazo al producto que venía liderando. Nokia, que venía cayendo en picada, acaba de firmar un contrato con China Mobile que puede relanzar sus Lumia (Javier Martin, hoy en El País de Madrid). Los celulares iPhone están siendo superados por los Android. Y también las tabletas "originales", iPad ven recortado su dominio por las Android.
Así pues, no es de extrañar, informa Javier Martin, que Apple ha perdido algo más del 20% de su valor en bolsa desde que llegara a su máximo de 21 de setiembre pasado, 705 dólares. Cotizó ayer a 538$....sin embargo, que no cunda el pánico, su revalorización en este año aún es superior al 30%...
Qué enorme desafío para los dirigentes de estas empresas mantener el ritmo de innovación, si es lento te come la competencia, si es demasiado rápido cuidado te equivocas y sacas un producto poco satisfactorio para el consumidor o que presente problemas de fiabilidad...
Podríamos decir que, en la actualidad, los teléfonos celulares o bien llamados “smartphones”, se han convertido en toda una cultura alrededor del orbe, hasta llegar a ser quizá, el eje fundamental de la necesidad informática de muchas personas, por el ineludible hecho de querer contar con la más avanzada tecnología en estos dispositivos; y a su vez, poder alcanzar tanta información como sea posible, y de forma inmediata.
ResponderEliminarLa carrera por llevar el estandarte de la innovación celular, ha producido que los dos principales vendedores de celulares hayan tomado tal vez, decisiones estratégicas un poco precipitadas, con el fin de lanzar al mercado algún modelo, de forma un poco anticipada, sin realizar las pruebas necesarias o suficientes, lo que ha producido que algunos aparatos hayan arrojado fallas tan importantes como en el caso del Samsung Note 7, que presentaba la posibilidad de explotar por deficiencias en el diseño interno del dispositivo (ver: https://www.movilzona.es/2017/01/23/estas-son-las-causas-oficiales-de-los-problemas-del-samsung-galaxy-note-7/); o bien, el caso de los iphone 6 plus, cuyas fallas en la utilización de materiales apropiados, provocaban que se doblara fácilmente (ver http://www.vanguardia.com/actualidad/tecnologia/280520-por-que-se-dobla-el-iphone-6-plus).
Producto quizá, de estos pequeños deslices que han tenido que enfrentar dichas compañías meses atrás, han surgido otros grandes ganadores y son los nuevos competidores, quienes paso a paso, lentamente, pero en forma constante y firme, se han podido filtrar en la industria de la tecnología celular inteligente y cada vez más, han incrementado su cuota de participación y han logrado arrebatar un importante porcentaje de consumidores, a los fabricantes tradicionales.
Ya dentro la industria en la actualidad, se ha registrado algunos cambios significativos respecto a la participación en el mercado de las principales marcas desarrolladoras, ya que la gigante de la tecnología Apple, ha perdido el primer lugar en ventas de celulares, y su lugar ha sido ocupado por la compañía Samsung, y podríamos decir que en forma casi definitiva. Sin embargo, eso no es lo más llamativo, ya que, en los últimos años, el mercado se ha diversificado tanto, que ha surgido importantes empresas fabricantes de este tipo de dispositivos, principalmente provenientes del continente asiático, como lo son Huawei, OPPO y Vivo, entre otros, que ofrecen productos con altos niveles de calidad y con precios muy accesibles, muchas veces casi por la mitad del costo de los productos que ofrece la competencia.
Dichas estrategias mercadológicas aplicadas por las compañías chinas, relacionadas esencialmente a la fabricación de dispositivos de alta gama, pero con precios muy bajos con respecto a los de los competidores, les han significado a estas empresas emergentes, asegurarse un lugar privilegiado dentro de los primeros lugares del mercado mundial de teléfonos inteligentes para el primer trimestre del 2017, según informó la compañía IDC (International Data Corporation), encargada de medir el comportamiento de los mercados mundiales y la industria en general (ver artículo en http://www.idc.com/getdoc.jsp?containerId=prUS42507917), donde se puede observar claramente, que al comparar el primer trimestre del 2016 con el mismo periodo del 2017, Samsung perdió un 1% de su cuota de mercado; la participación de Apple se redujo en un 0.5% y en cambio la compañía Huawei incrementó su porcentaje de participación en un 1.4% del mercado total.
No es de extrañar, que las compañías tecnológicas asiáticas, principalmente chinas, hayan aprovechado los pequeños tropiezos que se registraron en los últimos años por parte de las grandes empresas tradicionales, tanto en fallos técnicos como estratégicos, para así poder incursionar cada vez y con más fuerza en el mercado de los smartphones, y con ello, superar las principales barreras y fuerzas competitivas existentes en este macroambiente.
Saludos, atentamente: Edward Díaz S.
Muchas gracias Edward, es una excelente actualización del tema..."parte de guerra"...
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