San Juan -Sant Joan en catalán- es una fiesta arraigadísima en Catalunya, precedida de la Gran Verbena- Gran Revetlla- fiesta que celebra la noche más larga del año, que mezcla lo festivo -comida, bebida, música, fuegos artificiales- con un resabio esoterista: Quemar de todo para limpiar, para renovar energías. Se hacen -hacían, las normativas cada vez son más rígidas y alienantes- fogatas en todos los barrios, en media calle, cada vecino echaba en ellas lo que le placía...
Este año, ha venido con un obsequio político inesperado: The New York Times apuesta por el referéndum en Catalunya para terminar con el conflicto político que se viene arrastrando -e intoxicándose- desde hace varios años. El editorial, titulado "El desafío de Catalunya a España", concluye diciendo que
"el mejor resultado para España sería permitir el referéndum y que en
ese referéndum los catalanes rechazaran la independencia" (como
han hecho los votantes de Quebec y Escocia)". De lo contrario, sostiene,
"la intransigencia de Madrid solo inflamará las frustraciones
catalanas". Concisión y contundencia propias del periódico más influyente del orbe.
En Madrid, la reacción mezcla la indiferencia con la solemnísima invocación a la Constitución, incluso equiparando la española a las de Alemania, Italia o Estados Unidos...Omitiendo que la Constitución de 1977 fue redactada dos años después de la muerte de Franco, con todos los aparatos del Estado en manos de los ganadores de la guerra civil: ¿Se imaginan un fascista o un nazi dirigiendo los órganos de seguridad del Estado y, paralelamente, una comisión redactando una constitución con afán democrático?
Sin duda, esa Constitución sirvió, fue legitimada por el voto popular el 6 de diciembre de 1.978. La ciudadanía quiso evitar males mayores. Así y todo una fracción del ejército pretendió levantarse en armas el 23 de febrero de 1.981. El golpe fracasó; pero, no lo duden, el mensaje caló acerca de quién tenía la última palabra en la España democrática.
Han pasado más de treinta años de esa intentona, casi cuarenta de la promulgación constitucional, España ha cambiado muchísimo, incluidas las Fuerzas Armadas, ahora un ejército integrado en la OTAN, rodeado de militares de potencias democráticas, y que ha ido ganando su prestigio en donde ha sido llamado a mediar por encargo de Naciones Unidas. Preámbulo para descartar una vía militar para "resolver" el asunto; por lo tanto, si la solución ha de ser necesariamente política, votar en una democracia es una vía muy recomendable...Así lo ve un número cada vez mayor de actores (como se dice ahora), TNYT incluido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario