Después de tal vez una década sin que se hablara de la inflación vuelve a ser noticia por su evidente repunte. El precio de los combustibles como indicador más destacado y alarmante por su efecto multiplicador en infinidad de productos y servicios.
Causas: Problemas de oferta relacionados con interrupciones en las cadenas de aprovisionamiento global, empezando por déficits de producción por cierres temporales de fábricas para combatir la pandemia, a la vez que se estimuló la oferta monetaria para reactivar la maquinaria económica . Y ahora más reciente la invasión de Ucrania por parte de Rusia, dispara la incertidumbre sobre dificultades de disponibilidad de petróleo, sin descartar la oferta de cereales y otros productos de la nada desdeñable economía ucraniana. (y por supuesto de la rusa, volcada en la guerra).
Consecuencias: Para contener la inflación, receta de manual antiinflacionariao: Subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Banco Central de Estados Unidos), base de fijación de tipos de interés para infinidad de economías nacionales, por supuesto, la costarricense incluida, que suben sus tasas locales. Se encarece la deuda externa, el pago de sus intereses ("servicio") se eleva, se necesitan más dólares (sube la demanda de esa moneda, sube su precio, devaluación colón, revaluación dólar como quieran). Deudas privadas se encarecen, ya no digamos si son en dólares. Empobrecimiento de las deudores que deben de dedicar más ingresos a sus deudas. Y empobrecimiento general por la subida de precios frente a ingresos estancados o que suben menos, y retrasadamente, al alza inflacionaria.
Frenazo inversor: Los préstamos nuevos se encarecen (los viejos también como ya dijimos supra) y se opta, por quienes tienen los recursos, por inversiones seguras en títulos valores (más atractivos puesto que han subido las tasas de interés...). Menor creación de empleo, y muy probable pérdida de empleos por cierre de negocios que acusan el menor consumo de muchas familias, acuciadas por las deudas y la atención de las necesidades más básicas...
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