Admiro a Apple, la pongo frecuentemente de ejemplo en clase por su capacidad innovadora en todas sus estrategias de mercadeo. No soy cliente suyo, no soy muy exigente en cuestiones de tecnología, no pago por lo mejor y más cool...
Dicho esto, dejo constancia - tan firme como modestísima- de mi total apoyo a su postura frente a las exigencias del FBI. Este organismo pretende que Apple desbloquee el iPhone del sujeto que tiroteó a más de veinte personas, pocos meses atrás, en la ciudad californiana de San Bernardino. Ceder a esa pretensión supondría "obligar a la compañía a abrir una puerta trasera en su sistema de encriptación" (El País, 25-2-16). Esa puerta trasera podría ser utilizada por el FBI, claro, y también para prácticas de espionaje ilegales, y por grupos terroristas, cárteles, mafias y un largo etcétera aterrador.
En palabras de Tim Cook, sucesor de Steve Jobs: "La única forma de conseguir la información -o la única que sabemos- es escribir un software que sería como equivalente a un cáncer para el software. Crear algo así sería muy mala idea. Jamás lo haremos". O dicho de otro modo, por el New York Times, en palabras de la crónica citada de El País, "tras este caso Apple se está planteando el diseño de sus aparatos -incluso en hardware- para hacerlos inmunes a posibles hackeos de la propia Apple".
Hace pocos días, El País daba cuenta de que Amazon, Box, Dropbox, Evernote, Facebook, Google, Microsoft, Mozilla, Nest Labs, Slack, Snapchat, WhatsApp y Yahoo! han publicado un documento para apoyar a Apple: " Los amigos, los firmantes abajo, competimos con Apple, también entre nosotros. En esta ocasión, queremos ser una sola voz dada la importancia de este caso". Por los siglos de los siglos...la unión hace la fuerza...
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