viernes, 4 de julio de 2014

LOS MERCADOS FINANCIEROS: DE LA CODICIA AL MIEDO Y VICEVERSA...

En la entrada de 26/8/13, hablaba de la emocionalidad en la ciencia económica: "El supuesto homo economicus que se rige por criterios de racionalidad no existe ni se le espera; como alguien sabio -seguramente filósofo- dijo, el hombre no es una ser racional, sino un ser que puede serlo...Lo que aplica sin duda a variedad de sus conductas con el dinero, repletas de emotividades o, mejor dicho, de debilidades, fundamentalmente pecaminosas (aunque no vayamos a proseguir por esta ruta), relativas a los bien denominados pecados capitales; soberbia, avaricia, envidia, pereza, etc. o sea, prácticamente todos...O, visto desde otro ángulo...nos comportamos como un auténtico rebaño, con un predominio del instinto gregario, de mantenernos física y mentalmente en la manada...Qué difícil quedarse al margen de las plusvalías de las que muchos hablan, no meterse en el negocio del momento".

El economista alemán Georg von Wallwitz ha escrito un libro ("Ulises y la comadreja". Ed. Acantilado. Barcelona, 2013) sobre el funcionamiento de los mercados financieros, repleto de observaciones sobre esa emocionalidad, un torrente de conductas alejadas de la racionalidad porque son guiadas por la codicia, en un extremo, o por el miedo en el otro, lo que explica los booms y, posteriores cracks, (en usuales onomatopeicas expresiones) que han marcado la historia de los mercados financieros del sistema capitalista. La ciencia económica se esfuerza por encerrar la realidad en modelos matemáticos (econométricos) cada vez más complejos; pero siempre se quedan cortos frente a la apasionante -y apasionada- realidad de la conducta humana. La ventaja de esas abstracciones, dice Wallwitz con fina ironía, es que cuando las cosas salen mal siempre se puede culpar al modelo...

Frente a la incertidumbre, Wallwitz recuerda la receta de toda la vida: experiencia, buen juicio, no dejarse llevar por las fantasías del dinero fácil; en suma, recomienda "un sano escepticismo"...

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