Días ociosos apropiados para variedad de pequeñas tareas domésticas o afines. Ordeno papeles, reviso carpetas (files) que han ido quedando enterradas al fondo de cajas o gavetas. En una encuentro varios artículos de uno de mis periodistas preferidos, ya citado en alguna otra oportunidad, Gregorio Morán, cuyas Sabatinas Intempestivas en La Vanguardia de Barcelona pasarán a la historia del periodismo español.
Releo, siguen teniendo total vigencia, hice muy bien en archivarlas. Me dedico hoy a la sabatina de 22/10/2005 titulada como esta entrada: Dos amigos de toda la vida salen a cazar jabalíes, es negra noche, la luna se ha esfumado. Divisan un grupo, tras los primeros disparos se produce una desbandada, siguen disparando tratando de rodearlos. Fatalmente, un disparo de Jorge mata instantáneamente a su amigo Jaime. Avisa de lo sucedido a la Guardia Civil e indica su ubicación aproximada, dejará las luces del doble tracción encendidas. A continuación se suicida.
Esa historia es precedida por la siguiente reflexión de D. Gregorio sobre la amistad, que copio: "La amistad es un estadio de sentimientos donde el sexo no ha volcado su carácter excluyente. El amigo es un pariente voluntario, libre, querido, sin ningún apego a las obligaciones de la sangre que marcan a la familia. Es decir, una relación basada en la libertad. Es posible que sea por esto que la amistad produce un arraigo que supera matrimonios, divorcios, enfermedades y sufrimientos. En definitiva, la amistad es un sentimiento ajeno a la religión y a las relaciones de poder, de sangre o de fe". Amén.
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