Para tomar perspectiva del fragor dialéctico entre la prensa constitucionalista y la independentista, leo artículos de la prensa extranjera, por lo general más desapasionada, más equidistante, calificativo por cierto cada vez más denostado por los primeros, síntoma evidente de radicalización, de frentismo, de exigencia de que hay que tomar partido por un bando y que cualquier concesión es una debilidad. Los dos artículos más recientes que he seleccionado destacan eso, una emocionalidad excesiva que ya predomina, lo impregna todo. Ceder es una derrota, una herida inaceptable en el orgullo.
Matthew Parris en The Times, 21-10-17: "Nadie quiere bajar un par de peldaños", "demagogos de segundo orden" agitan el conflicto y probablemente Madrid optará como es su configuración usual (trato de describir la expresión default-setting) por "el puño", Cataluña desistirá pronto o tarde...pero "volveremos al mismo punto en pocos años"...
Natalie Nougayréde en The Guardian, misma fecha: "Hay histeria, hipérbole, manipulación (...) parece una película de Pedro Almodóvar (...) Mujeres al borde de un ataque de nervios (...) en este caso, un país...". La atmósfera se va desquiciando, las conductas desequilibrando...Hemos de volver a Almodóvar, dice Natalie: En sus películas, en algún momento catártico, la locura se desvanece, reaparece el discernimiento, se evita la autodestrucción, surge la reconciliación...
No hay comentarios:
Publicar un comentario